Durante el primer siglo, los cristianos de Roma no tuvieron cementerios propios. Si poseían terrenos, enterraban en ellos a sus muertos. Si no, recurrían a los cementerios comunes que usaban también los paganos.
En la primera mitad del siglo segundo, después de tener algunas concesiones y donaciones, los cristianos empezaron a enterrar a sus muertos bajo tierra. Y así comenzaron las catacumbas. Muchas de ellas se excavaron y se ampliaron alrededor de los sepulcros de familias cuyos propietarios, recién convertidos, no los reservaron sólo para los suyos, sino que los abrieron a sus hermanos en la fe.
Con el edicto de Milán los cristianos dejaron de sufrir persecución. Podían profesar su fe libremente, construir lugares de culto e iglesias dentro y fuera de las murallas de la ciudad y comprar lotes de tierra sin peligro de que se les confiscasen.
Cuando los bárbaros invadieron Italia y bajaron a Roma, destruyeron sistemáticamente muchos de sus monumentos y saquearon muchos lugares, incluidas las catacumbas. Hacia la mitad del siglo VIII y el comienzo del IX los papas hicieron trasladar las reliquias de los mártires y de los santos a las iglesias de la ciudad, por razones de seguridad.
LOS SIMBOLOS
Los paganos desconfiaban de los cristianos y se mantenían a distancia, sospechaban de ellos y los acusaban de los peores delitos. Los perseguían, los encarcelaban y los condenaban al destierro o a la muerte. Como no podían profesar abiertamente su fe, los cristianos se valían de símbolos que pintaban en los muros de las catacumbas y grababan en las lápidas de mármol que cerraban las tumbas.
Como a todos los antiguos, a los cristianos les agradaba mucho el simbolismo. Los símbolos expresaban visiblemente su fe:
-El Buen Pastor con la oveja sobre los hombros representa a Cristo salvador y al alma que ha salvado.
-El orante: esta figura, representada con los brazos abiertos, es símbolo del alma que vive ya en la paz divina.
-El monograma de Cristo está formado por dos letras del alfabeto griego: la X y la P superpuestas. Este monograma indicaba que el difunto era cristiano.
-La paloma con el ramo de olivo en el pico es símbolo del alma en la paz divina.
-El Alfa y la Omega son la primera y la última letra del alfabeto griego. Significan que Cristo es el principio y el fin de todas las cosas.
-El ancla es el símbolo de la salvación, símbolo del alma que ha alcanzado felizmente el puerto de la eternidad.
-El ave fénix, ave mítica de Arabia, es el símbolo de la resurrección.
Los símbolos y los frescos son como un Evangelio en miniatura, una síntesis de la fe cristiana.